El PSC le da la espalda a Granados y pone en jaque el Hard Rock

La controversia en torno al proyecto Hard Rock ha puesto en a pere Granados, que mientras en Salou reclama a la Generalitat acelerar su aprobación, en el Parlament el PSC ha pactado con los comunes revertir los beneficios fiscales concedidos a la iniciativa. Esta doble postura genera incertidumbre sobre el futuro del proyecto y deja en entredicho la verdadera posición del partido socialista respecto a una inversión clave para el territorio.

El Ayuntamiento de Salou ha insistido en la necesidad de que la Generalitat agilice la tramitación del macrocomplejo, destacando su impacto en la economía local y la creación de 12.000 empleos directos e indirectos. Sin embargo, este impulso choca con la decisión del PSC en el Parlament de sumarse a un acuerdo con los comunes para eliminar los beneficios fiscales otorgados al proyecto, una medida que podría desincentivar la inversión y poner en riesgo su viabilidad.

Esta contradicción ha generado críticas entre sectores económicos y políticos que defienden Hard Rock como una oportunidad para el desarrollo de la Costa Daurada. Mientras el PSC local intenta capitalizar el apoyo al proyecto, la dirección del partido en Barcelona adopta medidas que lo perjudican, evidenciando un juego político que prioriza los acuerdos coyunturales sobre una estrategia clara para la inversión y el empleo en Cataluña.

En un momento en que la economía requiere estabilidad y certezas, la ambigüedad del PSC solo contribuye a generar dudas y retrasos en un proyecto que podría dinamizar sectores clave como el turismo y el ocio. La ciudadanía y los empresarios necesitan respuestas claras y un compromiso firme con la prosperidad del territorio, no discursos contradictorios que frenan el progreso.